Consumismo ¿una mejora para la economía?

El consumismo, se trata de plantear el problema del sobreconsumo social, que parece expandirse, como si la capacidad de la tierra fuera ilimitada. La gente gasta dinero sin control, independientemente de las consecuencias, y en la mayoría de los casos lo hace por el impulso de seguir los estereotipos sociales y el deseo de una "vida mejor". La conclusión a la que se llega en este artículo es que la solución factible es consumir de manera responsable, satisfacer todas las necesidades básicas y controlar el consumo antes de controlarnos, teniendo en cuenta todos los aspectos del consumo, no solo las ganas de hacerlo.

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Entre los principales efectos derivados de este modelo de consumo exagerado, podemos enumerar: el consumismo ha exacerbado la diferencia entre países desarrollados y países del tercer mundo; la diferencia entre personas ha aumentado; el agotamiento de los recursos naturales Y el despilfarro puede conducir a la degradación ambiental. Además, en el ámbito psicológico, podemos referirnos a la pérdida de identidad de las personas, que se definen como "valiosas" porque poseen bienes, no porque tengan verdadera esencia o acciones. A pesar de todos estos problemas, las empresas, los gobiernos y la propia sociedad defienden el consumismo porque trae beneficios a las economías de todos los países y beneficios como la creación de empleo para la sociedad.

Sí, todos necesitamos consumir bienes y servicios en nuestra vida diaria. El problema es cuando hacemos un consumo excesivo e innecesario. Según una investigación realizada por diferentes universidades de Estados Unidos sobre consumo y emisiones de gases de efecto invernadero en 79 ciudades, esto se llama consumismo y es responsable del 60% de todas las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) globales. La mayor parte de lo que consumimos es plástico , Sea necesario o no. Los plásticos contribuyen a las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) de la extracción de los recursos a producir (combustibles fósiles), su fabricación, transporte y disposición final. Cuando se convierten en desechos, emiten metano y etileno debido a la exposición al agua o la radiación solar en el aire. A pesar de esto, todavía se producen 380 millones de toneladas de plástico cada año en el mundo para diversos fines. De estos, 12,7 millones llegarán al océano, destruyendo la vida de más de 700 especies

Todos los días, bombardeamos anuncios sin piedad para convertir la demanda en demanda. Los expertos en marketing saben que las emociones están estrechamente relacionadas con los consumidores. Por lo tanto, los anuncios y los lugares están diseñados para evocar las emociones de las personas.

Este tipo de publicidad excesiva nos hace creer que todo lo que necesitamos ha producido en el mundo un fenómeno llamado consumismo, en la era en que vivimos el progreso tecnológico es cada vez más frecuente y este fenómeno es aún más notorio. Su impacto en nuestra sociedad es mayor que nunca..

El origen del consumismo

En la literatura actual, señalamos que el consumismo tal como lo conocemos hoy surgió al final de la Primera Guerra Mundial, cuando el mercado estadounidense sufrió una gran crisis económica, lo que provocó un alto desempleo y estancamiento o estancamiento económico. mercado.

Si bien la producción ha aumentado, la demanda de productos ha disminuido debido a la sustitución de personal por el progreso tecnológico, por lo que hay que estimularla de alguna manera.

Causas del consumismo:

Capitalismo

El consumo es el elemento central del capitalismo, porque no es razonable producir algo que no se puede consumir.

El vínculo entre activos y éxito

Existe la falsa creencia de que la acumulación de mercancías es fuente de felicidad y es sinónimo de éxito personal. En muchos casos, se utilizará "eres lo que tienes" o "vales lo que tienes".

La presión para expresar identidad e identidad incluye encontrar un sentido de seguridad destacándose y adaptándose a los grupos sociales a través de la propiedad y sus exhibiciones.

La publicidad y la marca ayudan a desarrollar la personalidad y les dan a las personas un cierto sentido de sí mismas, especialmente entre las personas más inmaduras y poco críticas.

Globalización

La globalización disolvió y amplió el ámbito territorial de los métodos actuales de producción, distribución y consumo.

publicidad

La publicidad es tan poderosa que tiene la capacidad de influir en las decisiones de compra de las personas, por lo que los productos se presentan desde el mejor ángulo, destacando únicamente sus obvias ventajas.

La publicidad atraerá a los individuos al consumo excesivo y lo conseguirá generando deseos o imponiendo consumos para hacerlos felices. Por ejemplo, un joven con una sonrisa en su rostro obviamente tiene éxito porque tiene el último teléfono inteligente para promocionar.

producto de baja calidad

Actualmente, el producto viene con fecha de caducidad, y una vez que llega, no queda más remedio que comprar otro.

Las marcas y los fabricantes se dan cuenta de que fabricar productos duraderos es contraproducente para sus ganancias, acortando así su vida útil.

Las bombillas, los cartuchos de tinta o los teléfonos móviles tardarán menos cada vez que se utilicen, por lo que deberán sustituirse.

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 Consecuencias del consumismo

Tiene un impacto negativo en el medio ambiente, y es fácil. Cuantos más productos se producen, mayor es el impacto en el medio ambiente. Cuantos más recursos se utilizan, mayor es la contaminación ambiental.

Conduce a una distribución desigual de la riqueza. El comprador gasta dinero innecesario y el fabricante o vendedor sigue enriqueciéndose.

Se sobreutilizan servicios como agua, electricidad y combustible, aumentando sus tarifas de pago y provocando que el sistema eléctrico o la distribución de los servicios básicos se vean afectados

Prioridad al procesamiento natural. Muchos productos industrializados han reemplazado a los productos domésticos o naturales. En muchos países, por ejemplo, se consume sopa enlatada, o se prefiere comer hamburguesas procesadas que hamburguesas caseras.

Interculturalización. El consumismo impone la cultura de otras regiones, lidiando con otros valores y otros niveles de consumo en estas regiones. En todas las culturas se despierta el deseo de las personas por el consumo ilimitado de bienes, que desprecian la cultura de cada lugar.

Causa ansiedad. Cuando alguien quiere poseer un artículo y claramente se deshace de sus posibilidades económicas, no poseerlo o tener que dedicar demasiado tiempo a comprarlo genera ansiedad, es decir, requiere mucho esfuerzo poseerlo .

El consumismo no promueve el desarrollo sostenible. El desarrollo sostenible no solo afecta a las personas contemporáneas, sino que también afecta a las generaciones futuras.

No se puede negar que el consumo es una actividad necesaria, sin él no puede haber desarrollo, pero requiere la responsabilidad de la industria y los usuarios de los productos y servicios.

Para que la economía crezca es necesario incrementar el consumo, esto es de sentido común: si aumenta el consumo, la empresa venderá más, contratará más empleados, pagará más salarios y todos se harán más ricos. Pero no es tan simple.

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Si miramos lo que pasó en España unos años antes de la crisis, veremos que es así. El consumo aumentó, las empresas vendieron muchas cosas, contrataron más empleados, pagaron más salarios y todos se hicieron más ricos, hasta que estalló la crisis, la gente encontró sobre consumo y ahorros insuficientes, especialmente ahorros. Inversión incorrecta. Esto se refleja claramente en los millones de pisos largos que aún no se han vendido, pero la inversión en otras empresas y actividades también fue errónea, y finalmente hubo que cortar, reciclar o desaparecer, provocando graves daños a trabajadores y empresarios.

Por tanto, hay que cuidar el poder adquisitivo de los ciudadanos, algo que los políticos casi nunca han hecho antes, pero no para hacer que los ciudadanos consuman más, y más consumo puede solucionar mágicamente todos los problemas. La solución no es consumir más, sino tener una economía sana y fuerte, por eso el consumo no es tan importante como un ahorro fiable y una correcta inversión.

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